PALABRAS A LOS MILITANTES DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, LUEGO DEL ACTO DE PRESENTACIÓN DEL PROYECTO “BOSQUES NATIVOS Y COMUNIDAD”, EN LA GALERÍA DE LOS PATRIOTAS LATINOAMERICANOS.
No saben mis queridos cuántas ganas tenía de hablar con ustedes. Primero, para agradecerles la militancia, el trabajo y también para felicitar a numerosos jóvenes, cuadros de nuestro movimiento que han llegado a ocupar intendencias en lo que consideramos una verdadera renovación generacional.
Quiero también pedirles a todos ustedes que redoblemos los esfuerzos, que las internas…Primero, no son tropa, son militantes, no se acostumbren al lenguaje de los dinosaurios, ustedes no son dinosaurios.
Son militantes que tenemos y no quiero solamente en el día de hoy dirigirme a los jóvenes, quiero dirigirme además de ustedes como jóvenes militantes, que hoy se han congregado aquí, quiero dirigirme a cada ciudadano y que ustedes lleven el mensaje también a cada ciudadano, a cada casa de nuestro país para que sepan que tenemos que defender nuestros derechos, que a nosotros y que a ustedes, sobre todo que muchas veces los han acusado de venir a los actos a comer choripan, que después de todo no está tan mal porque el choripan está hecho para comer, el problema no es los que comen choripan, el problema es los que se comen el aparato de televisión y entonces los indigestan.
Porque hay que comenzar o continuar esa tarea militante casa por casa, dejando de lado cualquier diferencia de adentro o de afuera y a los mediocres que desde afuera y desde adentro intenten dividirnos, hagan como Ulises, átense al palo de la nave y sigan el viaje porque tenemos que seguir trabajando.
¿Qué nos pasa compañeros muchas veces en nuestras propias filas? Yo lo vi porque necesitan dividirnos, yo los vi en el 2009 cuando a alguien le hicieron creer que hasta podía ser presidente. No, no silben a nadie porque en realidad, si uno se pone a pensar es gente que tiene todo el derecho a querer y a querer ser.
El tema es cómo los instrumentan desde afuera para dividirnos. Primero para debilitarnos intentaron debilitarnos de mil maneras, desde el Parlamento, con lock out patronales, con levantamientos policiales, con saqueos, con cosas que se armaban deliberadamente.
Hemos tenido la fortaleza y pese a todos los pronósticos apocalípticos, aquí estamos garantizando en un mundo que se cae a pedazos cada día que pasa, nuevos derechos a todos los argentinos. Y de eso se trata.
Siempre le hacen creer a alguno de los nuestros que si se aparta y hace otra cosa, puede llegar a grandes cosas. Después cuando no le sirve más, lo dejan de costado y van y como dice algún santacruceño, le ponen el banquito al que verdaderamente quieren que gane el ring.
Lo que no podemos nosotros como militantes y cuadros políticos, es el enroscarnos y el mirarnos el ombligo. Tenemos que mirar hacia afuera, tenemos que ir a sacar a ciudadanos y a cada vecino, no para hablar mal del adversario, no para hablar mal del otro, no necesitamos hablar mal de nadie, tenemos que contar todas y cada una de las cosas que hemos hecho en materia de derechos, de políticas. No quiero a ningún militante hablando mal del otro; lo quiero explicando y también explicándole a la gente que estas cosas no son magia, que estas cosas no se mantienen por que sí.
Que si se cambian las políticas, que si como algunos dicen se deja atrás una política de industria nacional y defensa del trabajo argentino, no solamente obreros van a quedar sin trabajo. Primero van a ser los obreros, después van a ser los vendedores en los comercios, porque cuando los obreros dejan de ganar plata, ya no pueden comprar nada en los comercios.
Y además tampoco esta clase media, que alguna vez también dejó de ser clase media y que hoy es la clase media más poderosa de la Argentina, también puede volver a dejar de ser clase media porque ya les pasó. Cuando creyeron que era posible desarrollar un país sin que desde afuera factores exógenos y también internos intentaron hacer fracasar este proyecto nacional, popular y democrático.
Miren, no estamos en cualquier lugar, estamos en la Galería de los Patriotas Latinoamericanos y este fenómeno, que no es un fenómeno porque no es ni meteorológico ni místico, es una estrategia deliberada de los países centrales para que los países emergentes que hemos construido el bienestar de millones compatriotas suramericanos, volvamos a ser lo que alguna vez fuimos. Y tenemos que estar dispuestos todos los argentinos a defender lo que hemos logrado.
Por eso, no hace falta si un argentino que hoy tiene su casa, su vivienda, si algún científico que está en el CONICET que volvió de afuera o que hoy puede investigar porque le pagan un salario digno y tienen laboratorios dignos o un comerciante quiere defender este proyecto, no tiene que ir ningún local, yo les digo que vengan a nuestros locales.
Júntense con sus vecinos en el living de sus casas, en la cocina, en el barrio y piensen un poco cómo estaban antes y que están en el mismo barrio porque a lo mejor tuvieron suerte y se pudieron ir a un country o a un barrio que antes no existía.
Por eso digo estas cosas, no son irreversibles argentinos, lo que es irreversible es la conciencia que hemos creado en millones de argentinos y especialmente en ustedes, los jóvenes.
Esa conciencia es irreversible, pero de hechos económicos y sociales, el bienestar, el progreso, la situación social y económica de cada argentino no es irreversible. Puede cambiar, si también cambian las condiciones macroeconómicas y el proyecto político, social y económico que conduce al país.
Por eso se impone la reflexión y se impone fundamentalmente el trabajo y la militancia, el trabajo a todos los compañeros que están en los barrios, en las calles, en las fábricas, en las universidades y la reflexión al resto de los ciudadanos cómo estamos y qué país queremos. Esto es fundamental.
Por favor, olvidemos todas las otras cosas que son absolutamente secundarias y anecdóticas. Sepamos que la historia nos está convocando a defender un proyecto de país que hay transformado la Argentina a pesar de muchos y a favor de muchos más todavía.
Porque inclusive, estamos ante la paradoja, ante la terrible e increíble paradoja de que tal vez los más beneficiados, los que más crecieron no se den cuanta y crean que solamente es producto de su propio esfuerzo. Esto no lo escribí yo, esto lo descubrió muchos años antes un gran pensador como fue don Arturo Jauretche o también otro gran intelectual como fue Enrique Santos Discépolo.
Por eso, quiero convocarlos, no solamente a ustedes sino a todos los argentinos, a un gran proceso de reflexión, a un gran proceso de reflexión nacional. No estamos en un partido de fútbol River-Boca, no estamos en una cuestión de oficialismo y oposición o si soy peronista o radical o socialista, estamos ante la disyuntiva de elegir un modelo de país.
El barco necesita los 40 millones de argentinos adentro, con nuestras diferencias, con nuestras diversidades, con nuestras complejidades, pero lo que el barco necesita es que el motor siga andando porque si no, nos hundimos todos.
Y les pido a todos los compañeros, a los amigos, a los simpatizantes, a los adherentes, a los que por ahí nos miran un poco de costado, es cierto no somos iguales todos los que estamos adentro del movimiento, pero sin ser iguales en estos doce años, porque es imposible en un movimiento de esta vastedad que ha incorporado no solo peronistas, sino gente que no viene del peronismo, es imposible que todos seamos iguales o tengamos las mismas cosas, la misma forma de expresarnos.
Lo importante son las políticas que se lleven adelante, los nombres no importan, importan las políticas que lleven adelante. Por eso, les pido a todos ustedes que cantan, “Néstor no se fue”, háganlo quedar, háganlo quedar porque él querría.
Y sepan además una cosa, para finalizar: yo el 10 de diciembre dejo de ser Presidenta de la Nación, pero siempre sepan por Dios, que voy a estar junto al pueblo cuando sea necesario, siempre. ¿Y saben por qué voy a estar? Porque para estar junto al pueblo, no hace falta estar sentada en ningún sillón de presidente; hay que estar en el corazón de todos y cada uno de ustedes, que es el mejor lugar en donde puedo estar.
Gracias compañeros, fuerza y a trabajar por la victoria. (APLAUSOS)
PALABRAS A LOS MILITANTES DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, LUEGO DEL ACTO DE PRESENTACIÓN DEL PROYECTO “BOSQUES NATIVOS Y COMUNIDAD”, EN EL PATIO DE LAS PALMERAS
Déjenme decirles que siento que lo que ellos soñaban: la unidad y la realización de lo que queremos, un país para todos, de lo que queremos un país integrado al mundo, pero desde nuestra propia soberanía. Nadie puede ser parte de nada si primero no es el mismo. Esto es la integración desde la identidad, desde la propia identidad, una identidad que hemos forjado muy fuerte, en estos años, con pilar también en los derechos humanos; vinimos a terminar con la impunidad también para que ningún argentino le pase lo que me pasó a mí, cuando tuve que bajar la cabeza, siendo la esposa del presidente, en un viaje a Francia y un presidente de un país extranjero, líder en el mundo, me pregunto, más que me preguntó me dijo que se país y su sociedad no podían entender cómo podían caminar por la calle, en libertad, quienes habían cometidos crímenes terribles de lesa humanidad. Me avergoncé y no pude contestar, tuve que cerrar la boca.
Hoy, en un mundo plagado de atrocidades, en un mundo donde las pantallas de televisión, las de afuera, porque acá te ocultan todo, nos devuelven las imágenes del horror de millones de refugiados que no encuentran lugar, nos devuelven el horror de una guerra sin fin, donde la gente huye con sus hijos, donde nos devuelven el horror de niños muertos en una playa, hoy, en esta Argentina que también estuvo sumida en una noche negra y oscura, como fue la de la dictadura, puede mirar a sus hijos con orgullo para decirles que ustedes fueron responsables de vivir en un país democrático, donde se respetan los derechos humanos, como en ninguna otra parte del mundo. (APLAUSOS).
Y no solamente me enorgullezco de formar parte de este movimiento, que agrupa a distintas fuerzas políticas, policlasista, plural y diverso, sino que además dentro de nuestro propio partido logramos superar enfrentamientos que en la época de los 70, dividieron a los sindicatos, a los trabajadores, de los estudiantes y las organizaciones juveniles.
Hoy, los trabajadores en sus sindicatos; los jóvenes en sus organizaciones sociales y barriales, en sus universidades, los distintos partidos políticos están en un mismo Patio de las Palmeras diciendo y pensando lo mismo.
Me olvidaba también de muchos radicales que se han incorporado también, me olvidaba también injustamente de muchos radicales que se han incorporado sin perder su identidad.
No queremos travestis políticos, al contrario, nosotros queremos gente que tenga su identidad porque cada uno tiene su historia, y cada uno de nosotros hemos cometido errores y horrores en un pasado que nos dividió.
Por eso les pido a los argentinos la unidad, cómo pueden hablarnos de divisiones a nosotros, que hemos logrado agrupar a distintas fuerzas políticas, pero no para ganar una elección y después hacer un desastre en el gobierno, sino para liberar y construir un país. (APLAUSOS).
Ya tuvimos, ya vivimos en el 99 la dura experiencia de los que se juntaron únicamente en contra de alguien y a los dos años el país se desmoronaba. Hoy leía declaraciones de alguien…. las manos en la fuente, estamos más educados. Ya no metemos las patas, ahora las manos en la fuente, muy bien. Le comentaba que hoy leía declaraciones de alguien, no de nuestro espacio político sino del otro espacio político que decía que el sector era horizontal y democrático y no sé qué cosa y que nosotros éramos monárquicos y que el que llevan de candidato a presidente tiene que abandonar el carácter de secta empresarial y que otra cosa dijo, y corporativa. Dios mío, si empezamos otra vez con la vieja historia de juntarse únicamente para ganar una elección y después, mis queridos, hay que gobernar y gobernar – les puedo asegurar – que no es para cualquiera. (APLAUSOS).
Cuando estés y cuando estas sentado en ese sillón, al que todos… no me voy a ir, ¿adónde quieres que me vaya? No me voy a ir, cuando estés sentado ahí sos vos el que tenés que decidir, nadie decide por vos, que nadie se haga los rulos, nadie decide por vos, todas y cada una de las decisiones que tomás y tenés que hacerte de la fortaleza personal y la fuerza política que te respalda para poder seguir tomando las decisiones que beneficien a las grandes mayorías.
Por eso, mis queridos, quiero pedirles, esa canción maravillosa que ustedes cantan y que no sea solamente una consigna, que la unidad y la organización del pueblo, de la sociedad sea cada vez más firme, porque es el camino más seguro para reasegurar los derechos que hemos conquistado. En las urnas no van a meter una boleta con un nombre, en las urnas van a meter la boleta con todos los derechos que ganaron en estos años, cada uno de esos derechos.
Otros van a meter algunas mentiras, algunas posiciones cambiadas sin explicar por qué, entonces es necesario que a la hora del conteo, sean más los derechos, que las mentiras y las cosas disfrazadas.
Por eso les pido a todos, acá me apuntan que salude a todos los que están afuera, porque sé que en la plaza hay muchos. Mando mis saludos para ellos y quiero decirles algo. A alguien se le había ocurrido y no fue la primera vez que fuera a saludar al balcón. No, no, no, ese balcón tiene dueño y dueño, a ese balcón solamente puede ir la figura de los que ya no están.
A mí gusta este balconcito, el del otro patio… uy, qué hermosa que está la Plaza, discúlpenme compañeros. No puedo salir a hablar desde el mismo balcón, en que hablaron Perón y Eva Perón. No me da el cuero, a mí sí que no me da el cuero, el balcón es de ellos de acá a la eternidad.
Compañeros, a trabajar por la victoria de la Patria, por la grandeza de la Nación. Vamos todavía. (APLAUSOS)
PALABRAS A LOS MILITANTES DE LA PRESIDENTA DE LA NACIÓN CRISTINA FERNÁNDEZ DE KIRCHNER, LUEGO DEL ACTO DE PRESENTACIÓN DEL PROYECTO “BOSQUES NATIVOS Y COMUNIDAD”, EN EL PATIO DE LAS MALVINAS
Hola, cómo están, gracias.
Yo ya estoy casi sin voz y quiero agradecerles la presencia en estos maravillosos, increíbles e indescriptibles patios militantes.
La verdad que ver la Casa Rosada, esta Casa Rosada de la que algunos se fueron en helicóptero; esta Casa Rosada que albergó muchas veces a monstruos; esta Casa Rosada a la que muchas veces se llegó en nombre de un proyecto, en nombre de una historia y después se hizo exactamente lo contrario, ha vuelto a resignificar su historia.
Yo ya estoy casi sin voz y quiero agradecerles la presencia en estos maravillosos, increíbles e indescriptibles patios militantes.
La verdad que ver la Casa Rosada, esta Casa Rosada de la que algunos se fueron en helicóptero; esta Casa Rosada que albergó muchas veces a monstruos; esta Casa Rosada a la que muchas veces se llegó en nombre de un proyecto, en nombre de una historia y después se hizo exactamente lo contrario, ha vuelto a resignificar su historia.
Cuando el 25 de mayo del año 2003, con apenas el 22 por ciento de los votos y anunciaba a todos los argentinos que venía en nombre de una generación diezmada y que no pensaba dejar sus convicciones en la puerta de entrada de la Casa de Gobierno, estaba anunciando el regreso de la política. No era solamente el de una fuerza política, no, era el regreso de la política a la Argentina y de las instituciones.
Yo recuerdo, porque era legisladora nacional, cuando los políticos no podían salir a la calle, cuando los empresarios tampoco podían salir a la calle, cuando los bancos estaban tapiados porque con martillos iban a golpear y reclamar sus ahorros, escuchaba el grito de que se vayan todos, veía las colas en las embajadas y en los consulados y él vino a prometerles que no iba a renunciar sus convicciones. Pero les prometió algo más, un país normal.
Y este último domingo cuando emitía mi voto, en mi querida Río Gallegos…Parecer ser que sabía jugar, además de jugar a la play, sabía hacer otras cosas también. Y además, estoy segura que a esos que les decían que juega a la play, también les gana jugando a la play.
Les decía…y eso que no conocen a Néstor Iván, sino les agarra un infarto masivo a todos. Le gustan las cámaras y el micrófono a mi nieto como pocas cosas, ya me preocupa.
Les decía que él había prometido también un país normal, un país normal que significa que cuando vamos a elecciones, no estamos en medio de una crisis económica ni vamos elecciones porque se adelantaron el calendario, porque pasó algún desastre y nadie se tuvo que ir antes. Ese país es el que tenemos que defender. Porque además es normal, porque logramos que los 40 millones estuvieran adentro, sin exclusión porque ha sido la característica de este proyecto y de este modelo, el de la inclusión.
Algunos, cuando hablamos de inclusión, la vinculan únicamente a los que estaban afuera porque no tenían trabajo o porque no tenían jubilación. No señor, este modelo es de inclusión porque incluimos a los empresarios que no tenían trabajo porque se importaba todo; incluimos a los productores que tenían embargados sus campos y a punto de ser rematados por el Banco Nación; incluimos a los científicos, a esos que habían mandado a lavar los platos y les pagaban 2 mangos con 80; incluimos a millones de jóvenes que hoy pueden ir y son la primera generación de estudiantes universitarios de sus familias y que ayer les aseguramos la gratuidad de la enseñanza.
Somos un modelo de inclusión porque bancamos a un hospital como el Garraham que le ponemos todo lo que le tenemos que poner de nuestra parte porque ahí se atienden pibes, no solamente de la Argentina, sino como hospital de excelencia vienen de otros países.
Incluimos porque han podido acceder a bienes culturales como nunca antes; incluimos porque millones de argentinos, que no conocían una playa argentina, hoy pueden veranear; incluimos porque millones de argentinos que nunca habían salido del país, hoy recorren el mundo; incluimos porque además, cuando habiendo grandes crisis internacionales como en el 2009 o la que hoy está asolando el país, acá está el Estado.
El otro día nos comprometíamos y esto lo digo como patagónica, se comprometía nuestro candidato a sostener la política que hoy permite que no haya despidos en el sector petrolero porque se está pagando un precio sostén interno para sostener la industria, los trabajos y el desarrollo de nuestra YPF recuperada y de las otras industrias del petróleo.
Incluimos porque a miles y miles de argentinos, que no eran sujetos de crédito para un banco, pero que tampoco lo eran para acceder a un plan de vivienda social, creamos un plan para que aquellos que tienen ingresos medios y medios altos puedan tener su casa propia sin hipotecarse históricamente a tasas usurarias en los bancos.
Por eso, que nadie se confunda, la inclusión no es solamente para los pobres, porque saben qué, si se creen eso pueden equivocarse y entonces pueden mirar al pobre y decirle, bueno, es porque o quiere trabajador, porque además, hasta algunos se olvidaron de que eran pobres porque no tenían laburo y creen que los que no laburan o que todavía no lo consiguieron es que son de vagos. No, es porque todavía nos falta, porque todavía faltan cosas que hacer, porque hemos crecido y porque además los que ascendieron, quieren seguir ascendiendo. Son las expectativas racionales de una sociedad que crece y que cada vez quiere vivir mejor. Pero ese vivir mejor, no se la van a dar lo que fundamentaron toda la etapa del neoliberalismo hicieron sus fortunas y amasaron sus fortunas durante las dictaduras.
Al contrario, esa inclusión y ese crecimiento se lo vamos a dar desde la fuerza política que generó millones de puestos de trabajo, que abrió miles de fábricas, que abrió miles de comercios.
Por eso, los convoco a trabajar, a convencer, a persuadir, a abandonar todo internismo. Si hay algún mediocre que dice pavadas, que siga diciendo pavadas, son los que no juntan un voto. Nosotros somos militantes y tenemos que aprender la lección, la tienen que aprender nuestros compañeros, algunos de nuestros compañeros.
Yo quiero dirigirme con todo respeto, cariño y afecto por los muchos dirigentes de nuestro partido que han cumplido una gran labor durante muchos años en distintos lugares, no importa, no voy a hacer nombres porque no es necesario, la política no es nombres, la política es conducta, acciones. Y quiero decirles que tantas veces se han desgañitado señalándoles a ustedes los jóvenes como un problema y que estos me venía a hablar no, porque los pibes están, no, porque los pibes del otro lado, no, porque los descamisados, no, porque los de Unidos y Organizados. Miren cómo perdieron tiempo con los pibes que trabajan para que el proyecto crezca. Y miren hoy, con todo respeto, tanto que algunos se quejaban de los pibes de La Cámpora y ahora tienen con todo respeto, y la saludo porque ha sido por el voto popular, una piba de 36 años del PRO gobernándoles la provincia de Buenos Aires.
Entonces, que aprendan por favor, que aprendan que no sean tontos, que no se miren el ombligo, que cada dirigente cumple su ciclo y si no les interesa, mírenme a mí, que he sido dos veces presidenta de la República, que he tenido el honor, porque te pueden elegir una vez, la primera vez te pueden elegir y me eligieron por el 45 por ciento de los votos, pero que te elijan por segunda vez una vez que te conocen y con 10 puntos más de cuando no te conocían, y haber sido la presidenta más votada después de Perón, yo ya tengo todo, querido, no quiero más. ¡Qué más puedo pedir!
Solo les pido a los hombres y mujeres de mi fuerza, inteligencia. Porque nos quieren dividir. Primero nos dividieron en dos, para ponernos en jaque y ahora quieren dividirnos en tres para llegar al gobierno. No seamos tontos, seamos cuadros políticos pensantes, militantes pero pensantes.
Y a los ciudadanos argentinos, volver a convocarlos, no hace falta que piensen en todo igual, seguramente tenemos puntos de disparidad. Pero yo estoy segura que tenemos un punto en común: nadie quiere vivir peor de lo que hoy está, todos quieren progresar e ir para adelante y ahí tenemos que apuntar.
¿Quién lo va a garantizar? ¿Los que querían privatizar Aerolíneas Argentinas? ¿Los que querían y no nos apoyaron en la recuperación de YPF? ¿Los que no votaron el matrimonio igualitario? ¿Los que no votaron la fertilización asistida que permitió que muchas parejas tuvieran un hijo? Entonces, argentinos, pensemos.
Hablando de patria sí colonia no, dentro de pocos días se cumplen los 10 años del ALCA, del no al ALCA, allá veo una bandera.
Eso es, unidos y organizados como nunca y para la victoria.
Gracias.