NO CONFUNDIR DERECHA CON FASCISMO

La derecha es un componente esencial dentro de todo sistema democrático. Ya sea como oposición que controla, pone límites a los actos de gobierno , o como alternativa de poder , también necesaria . Es sano para un sistema político que haya períodos de gobierno en manos de la derecha, que limpia excesos que cometen las otras tendencias ideológicas cuando monopolizan el poder.

Además es importante que quienes tienen esas ideas o tienen intereses mejor representados por esa corriente, se sientan parte del sistema , alejando la tentación de atacarlo desde fuera, como tantas veces ocurrió en la Argentina post 1955 con el trágico epìlogo de 1976.

Es cierto que las  medidas extremas que adoptan ciertos chiitas de la derecha hacen mucho daño a la Economia y al tejido social., porque dinamitan a la industria, reducen el empleo, los salarios, el consumo y endeudan al país en el exterior.

Argentina está precisando y no tiene una derecha moderada como la que tiene Colombia con el Presidente Santos  que está a km de distancia del ultraderechista Uribe y sus parapoliciales, o el ex Presidente Piñeira de Chile, el Presidnete Fernando Henrique Cardoso en Brasil o lo que hubiera sido Larrañaga en Uruguay.

Es verdad que el brusco giro hacia el neoliberalismo , la preferencia por la desindustrialización via los TLC s con los países industriales, y la tendencia a financiar todo con préstamos externos, hacen mucho daño, crean crisis económicas y laborales de las cuales después se hace difícil salir, pero es el precio de vivir en libertad y democracia. Además es posible que después de tantos errores, la gente aprenda a votar teniendo en cuenta sus necesidade y no lo que la media le receta. No hay democracia veradera sin un pueblo maduro y esclarecido que sabe cuales son las consecuencias de cada decisión que adopta.

Ahora bien, UNA COSA ES LA DERECA QUE TIENE QUE SER PARTE DEL SISTEMA Y OTRA COSA SON LA ULTRADERECHA Y EL FASCISMO QUE NAVEGAN CONTRA EL. Es un poco la misma diferencia que hay entre la izqueirda y la extrema izquierda partidaria de la lucha armada y la dictadura del proletariado.

Yo siemrpe digo bromeando que es el enfrentamiento entre dictadura del proletariado y dictadura del empresariado.

MACRI NO ES FASCISTA . Por lo menos es lo que creo salvo prueba en cotnrario. Es un hombre con profundas ideas de derecha que le vienen desde la cuna y desde su educación en isntitutos privados de enseñanza. Y parece ser un hombre racional que aprende con sus errores ( ha dado varias marchas atrás desde que es Presidente ). Pero está muy mal rodeado. Por un lado porque predominan en su gabinete los directivos de grandes empresas multinacionales, como es el caso dramático de su Ministro de Energia nada menos que un socio de la Shell, que es poner al lobo para que cuide el gallinero. Pero lo más grave está en el sector político donde se atisban fuertes inclinaciones fascistas de algunos de sus funcionarios.

Son los que le soplaron al oído la intervención de la Suprema Corte nombrando dos jueces por decreto, el aumento de las tarifas dejando de lado la obligación de hacer audiencias públicas, los que echan cada vez más leña al fuego de las persecuciones contra los seguidores del gobierno anterior en el mejor estilo 1955 ( lo dijo hasta el Papa ), y los que quieren realizar una masiva decapitación en el poder judicial para limpiar todo atisbo de independencia frente al poder ejecutivo.

Es grave lo que ocurre con el Juez Rafecas, un Juez que en sus fallos ha evidenciado una total independencia del Poder Ejecutivo anterior y que no puede ser indicado como un simpatizante del kichnerismo, que ahora la derecha fascista quiere incinerar porque se resistió a las presiones de revitalizar la absurda denuncia de Nisman contra Cristina Kirchner por un supuesto pacto de impunidad con Iran, basado en el texto del tratado con dicho país que el Congreso argentino aprobó pero que nunca entró en vigencia porque el Parlamento irani lo consiederó perjudicial para su país y porque la Suprema Corte argentina lo declaró inconstitucional porque una de sus cláusulas preveía el traslado de jueces argentinos al Iran para interrogar a los sospechosos de haber participado en el ataque a la AMIA.

Conviene guardar la lista de los firmantes de la solicitada pidiendo la decapitación del juez y la caza de brujas en el Poder Judicial, para saber quien es quien en el fascismo argentino.