miércoles, 24 de febrero de 2016

LA LUVIA Y EL TRANSITO EN SP


Uno de los errores más graves del régimen militar brasileño , a quien el país le debe un fuerte impulso a su industrialización y la diversificación de exportaciones, fue privilegiar el trasporte automotor por sobre el ferroviario.
 En las ciudades esto significó privilegiar los túneles, cruces elevados y hasta autopistas internas ( tanto SP como RIO tienen al menos  una calle de dos pisos, dado que el espacio angosto impidió hacerla de dos manos ). El problema es que debido a la peculiar topografia del lugar donde están esas ciudades , hay vías de transito que son capitales que no tienen paralelas. O sea que cuando se taponan no hay escape.
En RIO los taponamientos se dan más bien por actos de violencia delictiva ya que un par de estas vías pasa muy cerca de favelas dominadas por traficantes y a veces hay tiroteos entre ellos o con la policía haciendo que haya peligro de muerte en circular por la vía cercana. En SP el problema son mas bien las lluvias torrenciales a las cuales es proclive la ciudad, donde el cielo a veces descerraja un aguacero de no más de media hora pero donde llueve como para dos días de lluvia inundando todo. Como no hay paralelas, la única salida es armarse de paciencia y esperar. Y rezar para que el motor no se humedezca y entre a fallar.
Yo vivía en SP relativamente cerca de mi trabajo. Pero aun asi tenia que hacer una combinacion omnibus-subte-omnibus que era bastante cansadora y que terminaba llevándome unos 70 minutos de viaje. Como mi cargo implicaba el derecho a tener auto de la cia. yo negocié la renuncia a dicho derecho a cambio de que me pagaran la ida y vuelta en taxi, con lo cual la cia. ahorraba dinero, porque mantener un auto era mucho más caro que pagar dos viajes diarios de taxi. Con el taxi mi viaje de 70 minutos bajaba para 25 y era bien menos cansador.
Sin embargo estaba el problema de los embotellamientos cuando llovia.
 Un dia que mi madre venia a visitarme y llegaba a las 19 hs. a mi casa, yo salí como siempre a las 18 hs. del trabajo , tomé el taxi que debía dejarme en casa a las 18,25 y cataplum! Cayo el temporal. Llegue a casa a las 21 hs. encontrando a mi madre angustiada sentada en el hall del edificio pensando qué habia pasado porque ella no había tenido problema alguno para llegar a casa desde el aeropuerto..

En SP el hombre propone y la lluvia dispone.


http://elpais.com/elpais/2016/02/23/opinion/1456243080_414927.html

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