EN BRASIL CAEN DOS AVIONES DEL CHAPECOENSE POR DIA

Ocurrió hace un par de semanas en Rio de Janeiro. Un helicóptero de la policía cayó a tierra y murieron sus ocupantes. La prensa inmediatamente divulgó que había sido abatido por los traficantes de la favela CIDADE DE DEUS  internacionalmente famosa por el excelente film que lleva su nombre y que fuera  rodado en  ella. Un grupo de policías del batallón  donde servían los hombres que murieron en el helicóptero caído tomaron  inediata represalia. Hicieron un rastrillaje en la favela y secuestraron a 7 jóvenes, todos ellos negros, conocidos por trabajar para los traficantes de la villa. Los llevaron a un descampado , los fusilaron y dejaron los cuerpos abandonados en el lugar, donde fueon encontrados un  par de días después por parientes que habían salido a buscarlos y que conocen los lugares donde normalmente los policías arrojan los cadáveres de las personas que ejecutan.

Los participanes cometieron la imprudencia de jactarse de lo hecho en las redes sociales y están ahora procesados. AHORA TODOS SE PONEN A LLORAR PERO CON NOSOTROS NO SE JEUGA , fue la frase autoglorificadora de los asesinos de uniforme

Mientras, se descubrió por la pericia técnica y por la autopsia de los policías fallecidos que el helicóptero había caído por falla mecánica y no había sido derribado.

Varias cosas muestra este episodio :
- la connivencia de la policía con los traficantes, que determina que sólo cuando tienen algo de que vengarse los detienen pese a que los conocen y saben en qué andan.

-cómo las medidas son siempre sobre los jóvenes que son el último eslabón de la cadena de violencia y no sobre los jefes , dado que estos en muchos casos cuentan con la protección de los oficiales de la policía que reciben importantes sobornos

-el papel negativo que desempeña la prensa que atiza la violencia magnificando las noticias, como en este caso en que se denunció un ataque con armamento pesado que en realidad no ocurrió

Esto lleva a citar un  informe de AMNISTIA INTERNACIONAL según el cual mueren asesinados en  Brasil unos 58.000  ciudadanos por año  de los cuales el 77% es a la vez joven negro y favelado.  Para hacerse una idea es como si cayesen dos aviones del chapecoense cada día.