Una declaracion desafortunada del
cardenal, que va a servir para exacerbar las declaraciones también
desafortunadas de los ateos militantes.
La iglesia hace mal en embestir contra
el lacismo y la libertad de conciencia que es uno de los grandes activos que legó
a la posteridad el Uruguay batllista, y reabrir el áspero combate que en
el pasado librara contra esta tendencia.
Laicismo es simplemente neutralidad del
estado en cuestiones religiosas. Los uruguayos podemos ser libremente
cristianos, judíos, budistas ,musulmanes y hasta ateos y no queremos que nadie
nos prive de ese derecho, por bien intencionado que sea.
La imposición de una creencia religiosa
va por otra parte contra los principios de la propia religión, porque si Dios
existe y quisiera realmente imponernos la fe religiosa, le bastaría fulminar con
un rayo a todos los que no creen. Y no es esa la enseñanza de la religión, que
defiende la tesis de que Dios recompensará a sus fieles por su fe con
la vida eterna en el paraíso. Si les imponemos la religión los
privaremos de ese derecho que Dios les quiso dar a los hombres que es el de
creer y con eso salvarse. Quien impone una religión es por ende, si aceptamos
como válido el texto sagrado, un hereje y está sujeto a condenación eterna.
Del mismo modo me parece totalmente
absurda e incorrecta la actitud de los que condenan las demostraciones externas
de religiosidad. La gran lección del estado laico batllista es que cada uno
tiene el derecho y el deber de llevar adelante su propias convicciones sin
presiones externas. Batlle nunca llegó a los extremos de la REVOLUCION
MEXICANA que hasta hace muy poco prohibía
a los sacerdotes y monjas salir a la calle con sus ropas religiosas.
No queremos vivir en un pais como la
España franquista o el Iran de los ayatollahs pero tampoco en la Union Sovietica marxista donde el ateísmo era de
hecho una religión en la que todos debían creer ( al menos en público ).
http://www.republica.com.uy/cardenal-sturla-insto-a-la-sociedad-uruguaya-a-sacarse-el-balde-laicista/592868/
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