LOS ACUERDOS DE OSLO
Los acuerdos de Oslo fueron firmados por Mahmoud
Abbas, de la OLP, el Ministro de Relaciones Exteriores, Shimon Peres por
Israel, la Secretaría de Estado de los Estados Unidos, Warren Christopher y el
canciller Andréi Kozyrev por Rusia el 13 de septiembre de 1993, en presencia
del representante de la OLP, Yasser Arafat, el Primer Ministro de Israel,
Yitzhak Rabin y el presidente de los Estados Unidos, Bill Clinton, en una
ceremonia oficial y pública en Washington Dc.
No se trataba en realidad de un acuerdo de paz
definitivo sino una suerte de alto en las hostilidades, mientras se negociaba
una paz duradera para lo cual las partes se imponían un plazo de 5 años.
Mientras, se establecían una serie de normas
detalladas sobre como administrar los territorios, a quien competía que., la
creación de una Admnistración Nacional Palestina, que sería el germen del
futuro Estado Palestino . Esta Autoridad tendría jurisdicción limitada en
materia educativa, cultura, salud, bienestar social, tributación directa,
turismo y el establecimiento de una policía palestina.
Israel por su parte conservaba la responsabilidad
por seguridad en las fronteras internacionales y los puntos de cruce con Egipto
y Jordania. Israel también conservaría la responsabilidad de la seguridad de los
israelíes en Cisjordania y la Franja de Gaza, los asentamientos israelíes en
esas zonas, y la libertad de movimiento en las carreteras.
Era apenas un inicio y los tres temas mas difíciles
quedaban por ser discutidos :
TERRITORIOS – Los palestinos, que originalmente
vetaban la mera existencia del Estado de Israel en tierras que les fueron arrebatadas a
ellos por la resolución de la Onu, luego de haber perdido varias guerras
ahora veían la partición dispuesta por la ONU como el mal menor y por lo tanto
aceptarían gustosos lo que antes repudiaban. Pero los israelíes después de
haber ganado varias guerras, no estaban dispuestos a volver a los límites
creados por la ONU y quería incorporar de manera permanente algunos de los territorios
conquistados, varios de ellos objeto de una calculada política de asentamientos
destinada a rendir irreversible la ocupación.
Israel demostraba buena voluntad retirándose de la Franja de Gaza y de
algunos de los asentamientos en Cisjordania.
Este tema era con todo el más fácil de resolver , pese a que en 25 años
los asentamientos habían crecido de 13 a 120 y sus habitantes de 4400 a 100.500 fruto de la enaz persecución por
parte de sectores de Israel de la absorción definitiva de estos territorios. En
realidad hay en este tema el enfrentamiento de dos pueblos que niegan al otro.
Los palestinos niegan a Israel y sólo han aceptado el derecho a la existencia del
Estado que les fue impuesta por la ONU, luego de haber perdido varias guerras y
de haber aprendido de la más dura manera posible que Israel es la potencia
bélica numero 1 en la región, armada hasta los dientes por EEUU que según se
dice le han suministrado hasta armamento nuclear. E Israel niega ( y así son educados
los niños israelíes ) la existencia de un pueblo palestino. Para ellos
Palestina es una creación artificial del Imperio Romano para arrebatarle sus
tierras a los judíos, que son los únicos que tienen derecho a habitar esas tierras, derecho que
deriva de la historia y de las promesas divinas.
JERUSALEM – Feo problema y difícil de resolver. Los
israelíes ven a la ciudad toda como su capital eterna e indivisible y no están
dispuestos a compartirla con nadie. Los palestinos ven a Jerusalem Oriental como
su capital, y parte de su territorio tal como fue decidido por la ONU cuando
dispuso la partición. Ninguna de las dos partes acepta, como es obvio la
propuesta de la Iglesia Católica de internacionalizar la ciudad y declararla
una ciudad santa para las tres religiones monoteístas , colocándola bajo una
administración tripartita.
EL RETORNO DE LOS EXILADOS – La creación del estado
de Israel y la acción de las milicias sionistas de extrema derecha que llevaron
a cabo masacres en las aldeas palestinas muy en el estilo de las matanzas
turcas en Armenia, dieron origen a una fuga despavorida de los habitantes
palestinos, que dejaron sus propiedades.
El Estado de Israel votó una ley expropiando las propiedades de todo palestino
que hubiera abandonado su lugar de residencia. Los palestinos pleitean el
derecho de los exilados a volver a su patria y recuperar sus propiedades. Los
israelies obviamente no quieren ni oír hablar de ello.
Es un tema que no pueden resolver las dos partes y que
requiere la intervención internacional. No pueden volver los palestinos a Israel
porque por la mera lógica demográfica esto generaría a breve plazo una situación
en la cual los judios serían minoría en su Estado e Israel dejará de ser el estado
Judio que se quiso crear. No se puede pedir, como quieren los israelies, que
los Estados Arabes se hagan cargo del problema porque ellos no lo generaron y
es más votaron en contra de la resolución de la ONu, y además porque no todos
los palestinos son arabes. No hay otra solución que buscar un destino a estos
desplazados e indemnizarlos por las pérdidas sufridas. Pero esto debe ser hecho
no por los árabes que no son para nada los causantes sino las victimas de la
situación, ni por Israel que al fin de cuentas es una creación de la ONu y no
tiene por qué pagar indemnización por lo que la Organización Internacional le
adjudicó. En mi modesta opinión este es un problema que crearon los otros países ( los nuestros )
y consecuentemente son ellos los que deben resolverlo destinando territorios y
compensaciones que habrá que pagar entre
todos, porque fue la decisión de todos la que dejó a estas personas sin patria
ni hogar. PERO ESTE PROBLEMA SE HA VUELTO PARTICULARMENTE CANDENTE DE SOLUCIONAR
DESPUES DE LA OLA DE VIOLENCIA DESATADA POR EL TERRORISMO EXTREMISTA MUSULMAN,
porque qué país quiere tener en su seno a refugiados provenientes de esa zona,
que no se sabe si traen consigo el virus de la violencia. INFELIZMENTE CUANDO SE FIRMARON LOS ACUERODS
DE OSLO TODAVIA SE ESTABA A TIEMPO AHORA NO Y VA A SER MUCHO MAS DIFICIL
RESOLVERLO.
No hay comentarios:
Publicar un comentario