UN
ESPECTACULO BOCHORNOSO
513
DIPUTADOS SE REUNIERON EN Brasilia para discutir si le pedían o no al Senado que
abriera un proceso político que puede llevar a la destitución de la Presidente
del país. Se la acusa de una serie de maniobras contables para maquillar el
déficit del Estado que si bien son notoriamente incorrectas no son tan
infrecuentes como se intenta hacer aparecer, y habrían sido practicadas también
por sus predecesores en el cargo y por la gran mayoría de los Gobernadores.
De esos 513
diputados 299 tienen causas pendientes
en el Poder Judecial, la mayoría de ellos por asuntos bien más gravess que por
los desvíos formales de los que se acusa a la Presidente, que es inatacable
desde el punto de vista del uso del poder para beneficiarse económicamente. 79
de ellos están ya condenados y tienen una apelación en proceso. El propio
Presidente de la Cámara tiene un proceso en la Suprema Corte y otro en el
Tribunal de Etica Parlamentaria por haberse
revelado que posee una cuenta ( ahora bloqueada ) en Suiza con 5 millones de dólares
cuya procedencia no puede explciar. ( se habla ahora de concederle una amnistía
y que el proceso en su contra sea archivado )
En la calle
una multitud enardecida convenientemente atizada por la media y por los grupos
de inteligencia que operan en las redes sociales, presionaba de todas las
formas imaginables a los que votaban para que adhirieran a la maniobra.
El
Presidente les dio una manito alterando el orden de votación fijado por el reglamento.
Se votó no por orden alfabético de Estados sino de Sur a Norte para que los Estados
en los cuales había más certeza de apoyo al impeachment votaran primero y
crearan una sensación de ola imparable de votos por el si.
Y vinieron
los votos. En algunos casos los votos en sí fueron fuente de ridículo, como el
del Ministro hasta hace dos días que votó por la destitución de la Presidente
para la cual tabajaba hasta hacía pocas horas.
Pero el
mayor bochorno fue con los fundamentos de los votos.
El colmo del
ridículo lo tiene la diputada que votó por la abolición de la corrupción y en
homenaje a su marido intendente, que apenas 48 hs. después caía preso por
maniobras delictivas comprobadas con el dinero público.
O el
diputado Paulo Maluf, ex Gobernador de Sao Paulo durante la dictadura, que es
un asumido ladrón. Llegó a hacer propaganda electoral con el lema ROBA PERO
HACE, y es autor de una frase que se hizo célebre dirigida a los autores de
violaciones violentas seguidas de muerte que estaban ocurriendo en el Estado :
VIOLE PERO NO MATE. Maluf no puede salir
de Brasil porque está requerido por Interpol para ser enviado a Francia donde
debe una condena de 3 años de reclusión. Y era hasta hace poco aliado del PT y
de Lula. Fue célebre su obra construyendo el túnel por debajo de la Avenida
Paulista, que dejó inacabado y que tuvo un costo por km mayor que el del túnel submarino
enre Francia y Gran Bretaña. ( En puridad la democracia brasileña tiene con
Maluf una deuda de gratitud., Fue el rechazo absoluto a su candidatura por el
partido de los militares el que determinó que triunfara TANCREDO NEVES y diera comienzo a la transición democrática
) ( muchos dicen que fue una maniobra genial del experto en Inteligencia Militar
Gral. Golbery, monje negro de la dictadura, que se las ingenió con la
candidatura de Maluf para lograr que ganara Tancredo Neves un político de
centro derecha confíable para los militares y así estos entregasen el poder a
los civiles sin realmente irse del todo )
Hubo en los
fundamentos de todo un poco. En especial proven iente de los legisladores de la
“ bancada evangelica “ que detenta el 25% de las posiciones en Diputados. Todos
ellos votaron por Dios y por la moral. Pero hubo dos que entraron con justicia en la Historia por la puerta grande
.Votaron “porque estoy en contra de la educación
sexual de los niños en las escuelas públicas” y porque querían “impedir que niños decidan cambiar de sexo”.
Hubo bochornos de poca trascendencia
como los que votaron homenajeando a esposos, esposas, madres, padres,
hijos, abuelos y hasta suegras.
Pero el colmo de los colmos y ya no como fuente de ridículo sin como factor
de indignación ( y que fue aplaudido dentro de la sala y en las calles ) fue el
del Diputado Jair Bolsonaro que dijo que su voto era un
un homenaje a la memoria del coronel Brilhante Ustra, uno de los más feroces
torturadores de la dictadura.
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