El CONSEJO DE LA MAGISTRATURA, ahora con mayoría macrista
ordenó una Auditoría General sobre los juzgados que trabajaron en ilicitos
relativos a la corrupción en el gobierno anterior .
Esta medida, que pone en cuestión la estabilidad en
el cargo de varios jueces , es vista desde los dos lados de la grieta que
divide hoy a la sociedad argentina de manera totalmente encontrada.
Para el oficialismo es una medida saneadora que
buscará eliminar a los jueces corruptos que ampararon los negocios sucios del
gobierno anterior, que se había transformado en una mafia delictiva y que extendía sus tentáculos por doquier,
teniendo una firme base de impunidad basada en los jueces adictos del Poder
Judicial.
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