América Latina viene de una década donde
predominaron los gobiernos progresistas,
populistas, nacionalistas de inclinación más a la izquierda que los gobiernos
tradicionales de la década anterior más apegados a las teorías neolibdrales de
permitir que la economía ese maneje de forma autónoma dirigida por “ los mercados
“ es decir por los grandes grupos económicos.
Hubo mucha ilusión con el cambio de orientación de
los gobiernos y se esperaron grandes cambios económico sociales de partidos que
tenían una aureola transformadora y de izquierda.
Paralelamente AL disfrutó de una década de altos precios de sus materias primas
exportables, que al amparo del
subdesarrollo económico y el atraso industrial constituían la fuente principal
de ingresos.
En general los gobiernos progresistas tuvieron una
muy pobre gestión, limitándose a aprovechar la bonanza para efectuar redistribuciones
del ingreso que sirvieron para paliar la
situación de necesidad en que vivía buena parte de la población . Los subsidios
a los servicios públicos, los planes de ayuda, y los aumentos de salarios y
jubilaciones en porcentajes superiores a la inflación, determinaron el ingreso
al mercado de consumo de millones de latinoamericanos que dejaron de ser
miserables para ser pobres o dejaron de ser pobres para ingresar en la clase
media.
Pero el proceso tenía pies de barro en la medida en
que los gobiernos progresistas optaron por no llevar adelante reformas sustanciales
en las estructuras económicas de sus países.
El resultado de esto es que al caer los precios de
las materias primas y descorrerse el velo de abundancia que recubría la realidad, los latinoamericanos descubren que están
nuevamente en el punto de partida y que las mejoras obtenidas no son
sostenibles en el tiempo. Es como un enfermo que ha sido anestesiado para ser
operado y que vuelve en sí de la anestesia y descubre que el cirujano se ha
burlado de él,que no tiene ninguna cicatriz que indique que la intervención se
ha llevado a cabo, y que por lo tanto está exactamente igual a como ingresó al
hospital.
Para colmo , llevados por una copiosa propaganda de
la media que está en manos del poder económico, los latinoamericanos están
optando por devolver el poder a la derecha neoliberal que se está haciendo un
verdadero festin con los descubrimientos relativos al amiguismo y la corrupción
en los gobiernos progresistas que demuestran que los partidos progresistas han
caído en las mismas prácticas que criticaron a los partidos de derecha que les
precedieron en el poder, sólo que ahora
las críticas y denuncias son más trascendentes porque cuentan con la
amplificación del poderoso aparato de comunicación de los grupos dominan antes, y por la torpeza
de los neo corruptos que carecieron del savoir faire de los políticos de
derecha para robar, adquirido durante décadas de usufruír del poder. Un
político de derecha jamás sería filmado arrojando bolsas con dólares por encima
del muro de un convento. _Un ejército de abogados, contadores, jueces,fiscales
y banqueros bien aceitados financieramente les enseño a lo largo de años cómo
ocultar el dinero y llevarlo a lugares intocables comoPANAMA Y LAS BAHAMAS sin
necesidad de incurrir en el torpe manejo del entierro de billetes.
La izquierda además ha fracasado ampliamente en
modificar la cultura política de los países donde fue parte del gobierno. Las
grandes masas siguen creyendo en los axiomas que les han inculcado desde la
media y repite slogans de la derecha con una convicción digna de mejores
causas. Así pregona que el Estado debe achicarse sin percibir que el
achicamiento será en su contra, que debe eliminar subsidios y ayudas, sin percibir que serán los perjudicados directos
por tales políticas, que debe liberar el mercado de cambios sin percibir que
esto se traducirá en empobrecimiento al encarecerse los productos que
consume, que debe firmar tratados de libre comercio sin percibir que con ellos
se conseguirá disminuír el nivel de empleo en la industria, que se debe tomar
medidas en favor del campo sin percibir
que la traslación de ingresos hacia los
grandes propietarios de la tierra será en permuicjio de los trabajadores.
Y por encima de todo se está implantando el chip de
que los políticos son corruptos, y que la salida pasa por colocar no políticos
en el poder., con lo que crece la tendencia
de colocar empresarios y dirigentes de grandes empresas en el poder y se crea
un campo fértil para que vuelvan a aparecer los caudillos militares y los
golpes de estado tradicionales, un fenómeno que por ahora existe como amenaza
solamente, pero que mucho me temo llegará puntualmente a medida que se vaya
observando el fracaso de la nueva derecha,
que ha descubierto que puede acceder directamente al poder sin dividir su
triunfo con sus mandados de siempre, los sectores militares golpistas.
Mientras, cada vez m{as latinoamericanos abjuran de
la democracia, que les ha demostrado que no sirve para nada, ya que no ha
conseguido más que mejorar por un tiempito su situación , y que ahora está
sirviendo para agravarla vertiginosamente. Los más pobres hace rato que
dejaron de creer en el dictado de
Alfonsin de que CON LA DEMOCRACIA SE COME, SE EDUCA, SE CURA y ya no ven con
tan malos ojos vivir bajo el gobierno de una dictadura.
Nuevos Mesias nos esperan ¿??
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