Estaba todo preparado para que el Presidente de los
Argentinos se anotara un triunfo espectacular por partida doble.
En primer lugar Argentina recibía por primera vez en
la historia a todos los mandatarios de los países integrados a la OMC para una Asamblea plenaria, hecho inédito
además en América Latina.
El oficialismo y lo que es lo mismo la prensa se ufanaban
de esta gran victoria para ellos fruto del regreso de Argentina al mundo
OCCIDENTAL CRISTIANO Y CAPITALISTA ( SOBRE TODO ESTO ULTIMO )luego de los años
de soledad a que la condenó el régimen populista de los KIirchner. El mundo
además comenzaba a respetar a los dirigentes del país, gente seria, honesta ,de
trabajo en marcada oposición a la mafia de ladrones y vagos que integraba el
gobierno anterior.
Ese triunfo en buena medida fue dañado por dos hechos
: la violenta represión a todas las manifestaciones contrarias, la necesidad de
convertir a Puerto Madero en un bunker y los inconvenientes que de ello se
derivaron para los argentinos que allí trabajan , que para ingresar al área
protegida tuvieron que soportar interminables colas provocados por los demorados
controles. PERO ESTO NO FUE LO PEOR. Lo peor es el papelonazo internacional de
vetar el ingreso al país y deportar a delegados de ONGS que estaban acreditadas
junto la OMC originando protestas de diversas embajadas, que creó una imagen
más bien poco alentadora sobre la democracia argentina , que asimilaba sus
procedimientos a los de las dictaduras de antaño
El segundo triunfo , fundamental, iba a ser la firma
del tratado de libre comercio con la Union Europea, que iba a ser presentado
como un triunfo personal del Presidente Macri, erigido en gran líder continental,
que había conseguido rescatar del fracaso absoluto a este acuerdo capital para
que ingresen inversiones externas y se potencie el comercio, un acuerdo que fue
saboteado una y otra vez por la ex Presidente por razones ideológicas.
Se le adjudicaba tanta importancia en términos de marketing
que tanto Macri como Temer hicieron más y más concesiones en las negociaciones
llegando a un tratado leonino donde América Latina abre sus fronteras comerciales
pero Europa las mantiene cerradas, con la esperable secuela de quiebra de empresas
industriales a que esto iba a llevar, y la consecuente destrucción de puestos
de trabajo.
Pero ni siquiera este acuerdo leonino y tan poco
simétrico logró firmarse . Por que ¿? Porque los negociadores europeos no son
tontos y percibieron rápidamente el clima de angustia y desesperación de los
negociadores brasileños y argentinos más preocupados por el marketing político
que por los números y por ende dispuestos a ceder en todo con tal de llegar a
un final feliz que les permitiera hacer propaganda triunfalista, y entonces
sorprendieron con nuevas demandas de apertura para las importaciones y valores
más bajos de oferta para las importaciones agrícolas que las que se habían
conversado. Y el proyecto volvió atrás y tendrá que ser estudiado, aunque todo
hace suponer que las nuevas exigencias europeas serán en definitiva aceptadas
por nuestros “ firmes “ NEGOCIADORES, tan poco proclives a defender la
soberanía económica del Continente.
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