El Presidente de la Cámara que agrupa a las
industrias de la alimentación declaró ayer que los precios de los alimentos
están calculados a un dólar de 26 pesos. Suponiendo que el Gobierno tenga éxito
en estabilizar el dólar a 37 pesos , y restándole los 4 pesos de la nueva retención llegaríamos a un dólar neto de 33
pesos, un 27 % más que los 26 pesos.
El valor del dólar repercute directamente en el
costo de los insumos de la industria, ya
sea porque son importados o
porque son productos exportables en los cuales la demanda local compite en precio
con el valor del producto si es
exportado.
Se registra además un grave peligro de quiebra de
las empresas menores del sector y una concentracíón aún mayor que la existente.
Esto es debido a la gran caída de la demanda, que ha impedido que las empresas transfieran
la totalidad de sus aumentos de costos y además que no consigan ganar en sus
operaciones comerciales lo suficiente para compensar el brutal aumento de las
tarifas de servicios, determinando que muchas empresas hayan cerrado el primer
semestre de 2018 con abultadas pérdidas,
lo que si la situación empeora con estas
nuevas devaluaciones , las llevaría finalmente
a la decisión de cerrar sus puertas y despedir a todo su personal. Algunas
continuarían dedicándose a importar y distribuír lo que antes producían localmente.
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