JUGANDO A FOLLOW THE LEADER

Hay un juego infantil que era muy popular ( al menos en los EEUU ) en las épocas felices en que los niños no sabían lo que era WHATS UP o    PLAY GAME – Se llamaba FOLLOW THE LEAD  ( SEGUIR AL LIDER ) .

Consistía en que el primero de la fila hacía toda una serie de movimientos difíciles o absurdos y los que venían atrás tenían que imitarlo.

Pues bien  parece que PATRICIA BULLRICH ha decidió jugar FOLLOW THE LEAD  con DONALD TRUMP.

El nuevo Presidente de los EEUU ha resuelto descargar toda la cólera y la frustración de los trabajadores blancos norteamericanos que por primera vez en muchos años viven peor que lo que vivieron sus padres,en los miembros de las razas inferiores especialmente los latinos que invaden EEUU a través de sus fronteras en busca del trabajo que no consiguen en sus patrias, y tiran abajo el salario de los norteamericanos, o lo que es peor , a través de TLCs  roban las fábricas a los norteamericanos llevándoselas a sus países gracias a que le ofrecen a los empresarios mano de obra más barata.

Patricia para no ser menos salió el otro día a vituperar a los peruanos bolivianos paraguayos , razas inferiores que vienen de sus países a vivir en las villa miserias de Buenos Aires afeando la ciudad, colgándose gratis a los servicios. Viviendo de los subsidios que el populismo les dio sacándole plata a los que trabajan y robando y vendiendo droga.

Poco importa que las estadísticas muestren que el porcentaje de inmigrantes sobre el total de presos o el total de actos de delincuencia de los inmigrantes en relación al total  no es diferente del porcentaje en el total de la población lo cual desmiente esa predilección de los vecinos por el robo y la vagancia. Importa que con ello se obedece al prejuicio que anida fuertemente en la población blanca de la ciduad de Buenos Airesy hasta en zonas más pobres.

Si Hitler logró convencer a los alemanes, que apoyaron al menos con su pasividad la persecución contra los judíos porque según él acaparaban las riquezas de los alemanes, ahora –Trump y su discípula Patricia nos convencen de que quienes nos hacen pobres son los vecinos, no los oligarcas y los grandes consorcios enconómicos que nos explotan.

Lamentablemente no puedo criticarla con toda la fuerza que debería por mi doble nacionalidad, y por el recuerdo que en el país de la otra mitad de mi ser hubo alguien que dijo TODOS LOS ARGENTINSO SON CHORROS. Otra forma inaceptable de discriminación, a la que aún hoy muchos en mi otro país están abonados.